ALIÓN APOYA LA PRESERVACIÓN DE LA RIQUEZA ARQUEOLÓGICA DEL MAGDALENA MEDIO
Conocer el pasado y los orígenes como sociedad es parte fundamental de la historia de una región o territorio, es por ello que desde el 2019, La Empresa Colombiana de Cementos y su marca ALIÓN han promovido y apoyado la creación de espacios de conocimiento y conservación arqueológica en la región con el objetivo de visibilizar la riqueza cultural e histórica de las comunidades que habitaron el cañón del Río Claro hace más de 3000 años.
Para tal fin la compañía ha acompañado a la Secretaría de Cultura de Sonsón y a la Corporación Gruta en la creación de un museo que reúna diferentes piezas y fragmentos arqueológicos de gran valor histórico e importancia científica sobre los antiguos pobladores de la zona.
“Nuestra motivación para contribuir al desarrollo y construcción de comunidad, es poder acercar a las personas a su historia, generar el reconocimiento de su territorio y sentido de pertenencia hacia su cultura. Esto permite retribuir a las comunidades una parte de la historia de su territorio, sus antiguos pobladores, sus tradiciones y costumbres” afirmó Adriana Landazabal, Coordinadora de Gestión Social de la Compañía. Quien resaltó además que el museo será una herramienta para “incentivar los procesos de la red de turismo y contar estas historias a visitantes de otras regiones del país”.
El resultado de este esfuerzo es el Museo Arqueológico y Comunitario del corregimiento de La Danta, en el Magdalena Medio antioqueño en el que se pueden apreciar más de 2.200 vestigios de recipientes cerámicos y herramientas como raspadores, hachas en piedra pulida, entre otros, pertenecientes a grupos humanos que habitaron la zona de las colinas de Río Claro, dentro de los cuales destacan los pueblos Pantágoras
“Estos primeros pobladores se asentaron en la zona para aprovechar los recursos ofrecidos por las formaciones de piedra caliza de la ribera, que les permitieron crear herramientas que los ayudaran con sus labores diarias” explicó Luis Guillermo López Bonilla, antropólogo, director de proyectos e investigaciones de la Corporación Gruta.
Esta relación especial con la geografía de la zona puede verse también en la amplia presencia de pinturas y grabados rupestres (petroglifos) sobre la roca de varias cavernas en la región, las cuales tenían una importancia simbólica para las culturas que habitaban la zona, las cuales, de acuerdo con López Bonilla “eran utilizadas por estos grupos como lugar sagrado para desarrollar sus rituales espirituales”.
Adicional a la construcción del museo, también se construyeron dos aulas satélites para exhibir los vestigios arqueológicos en la Escuela Rural La Danta, sede Jerusalén y en las instalaciones de la Planta de Cemento ALIÓN, las cuales facilitarán el acceso de las comunidades más alejadas.
Este nuevo espacio arqueológico hace parte de la red de museos más grande por fuera del área metropolitana del Valle de Aburrá, en Antioquia. “Se trata de doce espacios que rescatan la historia, potencian el territorio y acercan a los jóvenes a tener un sentido de pertenencia”, explicó José Fernando Botero Grisales, técnico operativo en Cultura y Patrimonio de la Alcaldía de Sonsón.
Las acciones de impacto comunitario, son necesarias para acercar la historia de la región a las poblaciones locales y visitantes de todo el país. El museo construido es una evidencia clara de la capacidad de trabajo del sector público y privado en pro de las comunidades, el medio ambiente y la juventud, que crecerá con mayor conocimiento sobre sus antepasados. La red de museos está disponible para todo el público en el municipio de Sonsón, recogiendo fragmentos valiosos de la historia nacional.
